Ana Gómez-Carpintero / María Gómez-Carpintero
¡Queridísimos e-peregrinos!
¡Cuarta jornada de la peregrinación! Salíamos del hotel a las 07:30 de la mañana, media hora más tarde de la hora programada.
Tuvimos tres horas de autobús antes de la primera parada, las cuales las pasamos en su mayoría durmiendo. Allí pudimos disfrutar de un café calentito, y Luisje, de un par de vasos de leche natural. Por primera vez, el Señor apartó las nubes del cielo y pudimos disfrutar del sol de Brasil.
Continuamos nuestro peregrinar hacia Angra dos Reis con el rezo de las Laudes en el autobús. Hasta entonces, no veíamos más que hierbajos autóctonos, pero conforme íbamos proclamando los salmos, el Señor nos ha ido regalando unos paisajes maravillosos, en los que se veía el mar y las montañas.
Después de esto, terminamos con las presentaciones que comenzamos el día de ayer, las cuales han terminado con la intervención de José Luis en la que recordaba que en todas las peregrinaciones siempre se ha anunciado un nuevo compromiso. ¿Quién será el afortunad@?
Pasó una mañana, pasó media tarde, y por fin llegábamos al hotel. Disfrutamos de una buena comida y de un merecido descanso, el que aprovechamos para estar con los hermanos.
Cerramos este día con unas Vísperas en las alturas del hotel. En ellas, pudimos escuchar las primeras experiencias de algunos de los hermanos, marcadas por la alabanza y acción de gracias.
Verdaderamente ha sido un día de reposo y de santidad.
¡Un saludo especial a todos los abuelos de los peregrinos!
“Dios no viene a quitarte nada, sino a dártelo todo gratuitamente”
Raquel Ávila
“El Señor nos acompaña, está cerca, esperamos expectantes la manifestación de Dios”
Ana Muñoz
“Incluso en el descanso, el Señor se hace presente”
Matías Sánchez-Porro
“El Señor hace única cada peregrinación”
Álvaro Gómez-Carpintero