Adrián Jerónimo
Perth
Hoy, miércoles, séptimo día de nuestra peregrinación, y aún en la ciudad de Perth, la lluvia ha sido nuestra compañera durante toda la jornada. Este día ha estado dedicado a actividades más lúdicas que las que veníamos realizando.
Al rayar el alba nos hemos levantado y, tras un rápido desayuno, partimos hacia una reserva natural de canguros, koalas y demás fauna autóctona, donde nos encontramos, al fin, con los hermanos de santa Catalina y san Isidro. Durante nuestro trayecto rezamos Laudes, ya que aunque hoy dedicamos nuestra jornada a otros menesteres, no olvidamos de donde nos viene la vida. Tras dar de comer a canguros, acariciar koalas y demás especies, regresamos al centro de Perth para comer y realizar las pertinentes compras para familiares y amigos.
Con la caída del sol hemos regresado al hotel, donde hemos celebrado unas vísperas especialmente emotivas en las que ya se va notando el paso del Señor por estos peregrinos. Y por fin la tan ansiada cena que reparará nuestras fuerzas para continuar haciendo la voluntas de Dios.
Para información de las madres de los que aquí estamos el número de afectados por el virus se va reduciendo y poco a poco se recupera la normalidad.
Diario del peregrino
Fotos
